De Marino Restrepo
El papado es la silla de Pedro, son las llaves que Jesús le dio a Pedro para que todo lo que atara en la tierra quedara atado en el cielo, lo que desatara en la tierra quedara desatado en el cielo. De ahí se establece el papado, la roca sobre la cual el Señor edificara la Iglesia.
El papado es un llamado del Espíritu Santo no un llamado humano. El papado fue algo que estableció Jesús y por lo tanto no tiene control de los seres humanos. Los cardenales no son más que instrumentos para que en el momento de un cónclave donde se elige el Papa ellos sean el instrumento a través del cual el Espíritu Santo nombra al Papa. Ningún hombre puede disponer de ese nombramiento.
Yo no le puedo pedir a un Papa que renuncie. Un Papa puede renunciar porque tiene el derecho y bajo el Derecho Canónico lo puede hacer, como lo hizo Benedicto XVI, que su salud no le permitía continuar y el mismo lo confesó así y está documentado medicamente que tenía serios problemas de salud que le impedían seguir con su responsabilidad.
En la persecución que hay hoy contra el Papa es una persecución contra el papado porque cuando uno persigue a un sacerdote, a un obispo o a un Papa está persiguiendo a la Iglesia, no está persiguiendo solo al clero, está persiguiendo a la Iglesia.
Es muy importante de tener en cuenta que el Papa es quién ocupa la silla del papado por lo tanto cuando hablamos del Papa no estamos hablando simplemente de la persona humana que se sienta en la silla de Pedro, estamos hablando del papado que es una tradición sagrada que viene desde la entrega de las llaves de la Iglesia a Pedro. Y ese Papa es el que recibe esas llaves del espíritu de Pedro personalmente en el momento en que sale ese humo del Vaticano y es elegido como Papa. Esas llaves las recibe él, por lo tanto es un trabajo sagrado, no es un trabajo cualquiera. Ningún ser humano puede intervenir en eso, nadie. Entonces ¿qué hace Satanás en estos tiempos? Estos son los tiempos en el que nos hablaba San Pablo en el que los hombres serán soberbios, desobedientes, altaneros, se irán contra sus padres; todo eso será lo que veremos y que es lo que estamos viendo en el Clero.
La iglesia Católica de algunos lugares del mundo es una Iglesia muy materialista, muy superficial, muy vanidosa, muy pretenciosa, muy estructurada, muy educada, muy formada pero no es de Dios, no es espiritual.
Hoy se ha formado un complot contra el Papa, amparados en esas cosas que no entienden de él. Con esa excusa lo atacan para que renuncie; ustedes se podrán imaginar lo satánico que es esto. Ningún clero ni por muy alto que sea en la jerarquía cardenal - Obispo, sacerdote, laico - también tiene derecho jamás a pedirle al papa que renuncie. Eso es el acto de soberbia, de orgullo y de pretensión más grande de parte de un católico, es satánico, no es justificado.
Esta es gente que se considera dentro de la Iglesia de extrema derecha. Por mi conocimiento de las personas que están atacando al Papa que parecen ovejas pero son lobos disfrazados de ovejas, entre ellos muchos norteamericanos sé que muchos de ellos son terribles homosexuales de closet, son la mafia que está dentro de la Iglesia y que odian al Papa porque la mayoría de ellos son blancos supremacistas y son racistas y no admiten que un Papa sea un argentino o un latino. O sea que aquí hay una cantidad de movimientos satánicos terribles y hay una masa de católicos ingenuos que siguen a esta gente como son jerárquicos: obispos, cardenales y que son tan santos y que hablan tan bonito y que se graduaron en universidades muy famosas y saben tanto de la doctrina católica y hablan con una santidad que parecen que como digo yo que sudaran agua bendita pero dentro está metido el demonio. Porque tengan la seguridad ustedes que toda persona que se atreva a perseguir al Papa lleva el espíritu de Satanás. Que es que el Papa cometió un error aquí que cometió un error allá, que hizo esto, sin importar que excusa tienen nadie puede perseguir al Papa.
Porqué razón les estoy hablando de esto – a monjas – porque la Iglesia las necesita en este momento más que nunca. No se olviden todos los días a toda hora de tener al santo Padre en sus oraciones y también a la Iglesia. Porque estamos en una guerra muy grande. Es muy importante que ustedes tripliquen sus oraciones por el Papa y por la Iglesia porque las necesitamos.
La persecución es inmensa y muy astuta porque yo les dije que estos que están persiguiendo al Papa son obispos, cardenales, sacerdotes, que parecen muy santos y la gente se engaña con ellos pero yo se personalmente que son los lobos vestidos de oveja: terribles, terribles, terribles. La mayoría son de los Estados Unidos.
Le pido a todo el pueblo católico de Los Estados Unidos que es muy lindo y que hay mucha gente santa, sacerdotes y obispos santos, les pido que por favor arrodíllense porque estos que están persiguiendo al Papa están en peligro de condenarse. Si alguno de ellos se muere, así como está persiguiendo al Papa sin arrepentirse derecho a los infiernos se va. O sea que hay que pedir por ellos también porque el demonio los tiene encadenados y esto es importante tenerlo claro que no solamente vamos a orar por el Papa sino por los que los persiguen que son los que están más en peligro porque al Papa eso lo santifica. La persecución para estos otros los corrompe y se pueden condenar porque tienen un odio y una ira contra el Papa y lo están sembrando en la Iglesia. Ustedes vieran el tipo de correo que publican, el tipo de artículos que publican. Hay que orar mucho por ellos y por el Papa y por la Iglesia. El demonio está desesperado. Ustedes saben que entre más se acerca el regreso de Jesús, más desesperado el Diablo.
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