FRASES PARA SACERDOTES

"Cuando rezamos el Santo Rosario y nos unimos a María, estamos viviendo lo que es la familia porque cuando los hijos se reúnen con La Madre y juntos le oran a Dios, es la familia orando unida". DE: Marino Restrepo.
Papa Francisco a los sacerdotes que llevan "doble vida"

OCTUBRE, MES DEL ROSARIO - CÓMO REZARLO - PIDAMOS LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA




¿QUÉ ES EL SANTO ROSARIO?

Hasta ahora se ha considerado como la mejor definición del Rosario, la que dio el Sumo Pontífice San Pío V en su "Bula" de 1569: "El Rosario o salterio de la Sma. Virgen, es un modo piadosísimo de oración, al alcance de todos, que consiste en ir repitiendo el saludo que el ángel le dio a María; interponiendo un Padrenuestro entre cada diez Avemarías y tratando de ir meditando mientras tanto en la Vida de Nuestro Señor". El Rosario tradicional consta de 15 Padrenuestros y 150 Avemarías, en recuerdo de los 150 Salmos.

La palabra Rosario significa "Corona de Rosas". Nuestra Señora ha revelado a varias personas que cada vez que dicen el Ave María le están dando a Ella una hermosa rosa y que cada Rosario completo le hace una corona de rosas. La rosa es la reina de las flores, y así el Rosario es la rosa de todas las devociones, y por ello la más importante de todas.


El Rosario esta compuesto de dos elementos: oración mental y oración verbal.

En el Santo Rosario la oración mental no es otra cosa que la meditación sobre los principales misterios o hechos de la vida, muerte y gloria de Jesucristo y de su Santísima Madre. Estos quince misterios se han dividido en tres: Gozosos, Dolorosos y Gloriosos.

La oración verbal consiste en recitar quince decenas (Rosario completo) o cinco decenas del Ave María, cada decena encabezada por un Padre Nuestro, mientras meditamos sobre los misterios del Rosario. El tiempo aproximado de duración, en el segundo caso, es de dieciocho minutos.

La Santa Iglesia recibió el Rosario en su forma actual en el año 1214 de una manera milagrosa: cuando Nuestra Señora se apareciera a Santo Domingo y se lo entregara como un arma poderosa para la conversión de los herejes y otros pecadores de esos tiempos. Desde entonces su devoción se propagó rápidamente alrededor del mundo con increíbles y milagrosos resultados.

Entre las varias formas y modos de honrar a la Madre de Dios, optando por las que son mejores en sí mismas y más agradables a Ella, es el rezo del Santo Rosario la que ocupa el lugar preeminente. Vale la pena recordar que entre las variadas apariciones de la Santísima Virgen, siempre Ella ha insistido en el Rezo del Rosario. Es así como, por ejemplo, el 13 de Mayo de 1917 en un pueblo de Portugal llamado Cova de Iria, la Santísima Virgen insiste con vehemencia el rezo del Rosario a los tres pastorcitos, en una de sus muchas apariciones a estos tres videntes.

Siendo un sacramental, el Santo Rosario contiene los principales misterios de nuestra religión Católica, que nutre y sostiene la fe, eleva la mente hasta las verdades divinamente reveladas, nos invita a la conquista de la eterna patria, acrecienta la piedad de los fieles, promueve las virtudes y las robustece. El Rosario es alto en dignidad y eficacia, podría decirse que es la oración más fácil para los sencillos y humildes de corazón, es la oración más especial que dirigimos a nuestra Madre para que interceda por nosotros ante el trono de Dios.

El Santo Rosario prolonga la vida litúrgica de la Iglesia pero no la sustituye, al contrario enriquece y da vigor a la misma liturgia. Es por ello, que el Santo Rosario se enmarca como una plegaria dentro de la religiosidad popular que contiene un gran tesoro de volares que responde con sabiduría cristiana a los grandes interrogantes de la existencia.

El pueblo latinoamericano es profundamente Mariano, reconoce con una gran sabiduría popular católica, que llegamos a Jesús Salvador a través de María Santísima su Madre y desde los mismos tiempos del descubrimiento y de la conquista de América, se generó una gran devoción por la Virgen María; en Ella, nuestros pueblos siempre han mirado el rostro maternal de quien nos trajo la salvación y con la primera manifestación explícita de la Reina del Cielo en tierra americana, con rostro y figura de mujer mestiza, en México, se acrecentó aun mayor el amor y la devoción a ella en todos los países hispano parlantes, reconociéndola como nuestra propia Madre, llena de amor, de misericordia y de piedad para con sus hijos. Sentimiento que va en relación directa con el origen mismo de la Maternidad Divina: María es Madre de Dios Redentor es también verdaderamente la Madre de todos los miembros de Cristo, porque Ella colaboró con su amor a que nacieran en la Iglesia, los creyentes, miembros de aquella cabeza que es Cristo.

El paso del tiempo, las costumbres modernas, y la innovación de formas de oración, no pueden dejar a un lado el rezo del Santa Rosario. De hecho, los Santos Padres y los Santos han tenido una profunda devoción a este sacramental, nosotros como católicos y como amantes de la Reina del Cielo hemos de ser fervientes devotos del Rosario. Es digno de recordar que la familia que reza unida permanece unida. Que la recitación piadosa y consciente del Santo Rosario nos traiga la paz al alma y nos una más estrechamente a María para vivir auténticamente nuestro cristianismo.
.
Recordamos que en todo el mundo se está promoviendo el rezo del rosario por la intención de que el Papa, finalmente, consagre Rusia al Inmaculado Corazón de María con todos los requerimientos pedidos por la Sma. Virgen en Fátima.
.
.
MODO DE REZARLO:







1. Hacer el signo de la cruz y rezar el símbolo de los apóstoles o el acto de contrición

2. Rezar el Padrenuestro (*)

3. Rezar 3 Avemarías encomendando a la Virgen en la primera Avemaría, nuestra Fe; en la segunda, nuestra Esperanza y en la tercera, nuestra Caridad.

4. Rezar el Gloria.

5. Anunciar el primer misterio. Rezar el Padrenuestro.

6. Rezar 10 Avemarías
7. Gloria y Jaculatoria.

8. Anunciar el segundo misterio. Rezar el Padrenuestro.

9. Rezar 10 Avemarías



10. Gloria y Jaculatoria.

11. Anunciar el tercer misterio. Rezar el Padrenuestro.

12. Rezar 10 Avemarías



13. Gloria y Jaculatoria.

14. Anunciar el cuarto misterio. Rezar el Padrenuestro.

15. Rezar 10 Avemarías



16. Gloria y Jaculatoria.

17. Anunciar el quinto misterio. Rezar el Padrenuestro.

18. Rezar 10 Avemarías
.
19. Gloria y Jaculatoria.

20. Rezar la Salve.



21. Al finalizar se acostumbra rezar las letanías a la Sma Virgen.

.
(*)NOTA: Los pasos dos, tres y cuatro, pueden cambiar de orden y rezarse entre el paso 19 y el 20.



ORACIONES DEL ROSARIO:
.
SEÑAL DE LA CRUZ

+Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor, Dios nuestro. +En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.


SÍMBOLO DE LOS APÓSTOLES (CREDO)

Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

ACTO DE CONTRICIÓN (SEÑOR MÍO JESUCRISTO)

"Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, me pesa de todo corazón haber pecado, porque he merecido el infierno y perdido el cielo, y sobre todo, porque te ofendí a ti, que eres bondad infinita, a quien amo sobre todas las cosas. Propongo firmemente, con tu gracia, enmendarme y alejarme de las ocasiones de pecar, confesarme y cumplir la penitencia. Confío me perdonarás por tu infinita misericordia. Amén."

Otra versión: "Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser vos quien sois, bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca mas pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén".

PADRENUESTRO

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. El pan nuestro de cada día dánosle hoy, y perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores, y no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.

AVEMARÍA

Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tu eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

GLORIA

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.

JACULATORIAS

Puede usarse una de estas dos:

María, Madre de gracia, Madre de misericordia, defíéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Oh Jesús, perdónanos nuestros pecados, sálvanos del fuego del infierno y guía todas las almas al Cielo, especialmente aquellas que necesitan más de tu misericordia. (Oración de Fátima).

SALVE

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María!

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.

Oración. Omnipotente y sempiterno Dios, que con la cooperación del Espíritu Santo, preparaste el cuerpo y el alma de la gloriosa Virgen y Madre María para que fuese merecedora de ser digna morada de tu Hijo; concédenos que, pues celebramos con alegría su conmemoración, por su piadosa intercesión seamos liberados de los males presentes y de la muerte eterna. Por el mismo Cristo nuestro Señor. Amén.
.

LETANÍAS DE LA SMA. VIRGEN.

La letanía es una rogativa o súplica que se hace a Dios con cierto orden, invocando la Santísima Trinidad, y poniendo por medianeros a Jesucristo, la Virgen y los Santos. Las letanías más antiguas después de las de los Santos (año 595) son las de la Santísima Virgen. Llámanse lauretanas o de Loreto, y fueron aprobadas por Sixto V en 1587.

Señor, ten piedad de nosotros,
(Respuesta:) Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros.
(Respuesta:) Cristo, ten piedad de nosotros,
Señor, ten piedad de nosotros,
(Respuesta:) Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos.
(R=) Cristo óyenos
Cristo, escúchanos
(R=) Cristo, escúchanos,
Dios Padre celestial, (R=) ten piedad de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, (R=) ten piedad de nosotros.
Dios Espíritu Santo, (R=) ten piedad de nosotros.
Santísima Trinidad, que eres un solo Dios, (R=)ten piedad de nosotros.
Santa María, (R=) ruega por nosotros (*)
Santa Madre de Dios, (*) (EN TODAS SE RESPONDE "Ruega por nosotros")
Santa Virgen de las Vírgenes,
Madre de Jesucristo,
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre sin mancha,
Madre Incorrupta,
Madre Inmaculada,
Madre Amable,
Madre Admirable,
Madre del Buen Consejo,
Madre del Creador,
Madre del Salvador,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen Poderosa,
Virgen Clemente,
Virgen Fiel,
Espejo de Justicia,
Trono de la sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso de honor (1),
Vaso de insigne devoción,
Rosa Mística,
Torre de David,
Torre de marfil (2),
Casa de oro,
Arca de la Alianza (3),
Puerta del cielo,
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consoladora de los Afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los Ángeles,
Reina de los Patriarcas,
Reina de los Profetas,
Reina de los Apóstoles,
Reina de los Mártires,
Reina de los Confesores,
Reina de las Vírgenes,
Reina de todos los Santos,
Reina concebida sin pecado original,
Reina llevada al Cielo,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de nuestra Patria,
Reina de nuestra familia.
Reina de la Paz.
.
v/. Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo.
r/ . Perdónanos, Señor.
v/. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo.
r/. Escúchanos, Señor.
v/. Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo.
r/. Ten piedad de nosotros.

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios; no desprecies nuestras súplicas en nuestras necesidades; antes bien, líbranos de todos los peligros, Virgen Gloriosa y Bendita.
v/. Ruega por nosotros , Santa Madre de Dios.
r/. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

Oración
Concede, Señor y Dios nuestro, a tus siervos, gozar de perpetua salud de alma y cuerpo; y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, líbranos de las tristezas presentes y llévanos a gozar de de las eternas alegrías. Por Nuestro Señor jesucristo. Amén.
.
(1) Vaso de honor, que llevó el mejor de los licores, la Sangre preciosísima de Jesús.
(2) Torre de marfil, sólida y hermosa.
(3) Arca de la Alianza, que contiene a Jesús.
.

MISTERIOS DEL ROSARIO

MISTERIOS GOZOSOS (lunes y jueves)
1. La Encarnación del Hijo de Dios.
2. La Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel.
3. El Nacimiento del Hijo de Dios.
4. La Purificación de la Virgen Santísima.
5. La Pérdida del Niño Jesús y su hallazgo en el templo.

MISTERIOS DOLOROSOS (martes y viernes)
1. La Oración de Nuestro Señor en el Huerto.
2. La Flagelación del Señor.
3. La Coronación de espinas.
4. El Camino del Monte Calvario.
5. La Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor.
.
MISTERIOS GLORIOSOS (miércoles, sábados y domingos)
1. La Resurrección del Señor.
2. La Ascensión del Señor.
3. La Venida del Espíritu Santo.
4. La Asunción de Nuestra Señora a los Cielos.
5. La Coronación de la Santísima Virgen.

A los que recitan el rosario ante el Santísimo -aunque no esté expuesto- en una iglesia, oratorio público, o lo recen en familia, o en asociación piadosa, pueden obtener indulgencia plenaria de acuerdo con las condiciones acostumbradas.



FUENTE: www.catolicidad.com

*** En ocasión del mes del Santo Rosario dejo el link a las entradas que hemos relacionado y referido al mismo en diversas ediciones del blog. 

Puede acceder a este importante material recopilatorio siguiendo el siguiente link: 


http://bit.ly/16QuJ9E



No hay comentarios:

Publicar un comentario

EL HOMBRE DEBERÍA TEMBLAR

EL HOMBRE DEBERÍA TEMBLAR
San Francisco de Asís