FRASES PARA SACERDOTES

"Cuando rezamos el Santo Rosario y nos unimos a María, estamos viviendo lo que es la familia porque cuando los hijos se reúnen con La Madre y juntos le oran a Dios, es la familia orando unida". DE: Marino Restrepo.
Papa Francisco a los sacerdotes que llevan "doble vida"

El Evangelio Según Me Ha Sido Revelado. (María Valtorta).

Mi madre es la profundidad abisal de la pureza, de la gracia, de la caridad, de la obediencia, de la humildad, de toda virtud que sea de Dios y que Dios infunda a sus santos.



"NO TENTARÁS AL SEÑOR TU DIOS," está escrito.
Demasiadas veces se olvida este mandamiento.  Se tienta a Dios cuando se le quiere imponer nuestra voluntad.  Se tienta a Dios cuando imprudentemente se actúa contra las reglas de la Ley.  Se tienta a Dios cuando, habiendo sido perdonados por El, se vuelve a pecar.



"NO DESEARÁS LA MUJER DEL PRÓJIMO" se une a "NO COMETERÁS ADULTERIO," porque el deseo precede siempre a la acción.  El hombre es demasiado débil como para poder desear sin llegar después a consumar el deseo.  Y lo que es verdaderamente triste es que el hombre no sepa hacer lo mismo respecto a los deseos justos.  En el mal se desea y luego se cumple; en el bien, se desea, para luego detenerse, aunque no se retroceda.



Estamos tristes y TÚ nos consuelas.  Somos débiles y TÚ nos fortaleces.  Somos miedosos y nos infundes valor.  Para todos y para todos los casos, tienes preparado el consejo y el conforte. 
Maestro, TÚ siempre estás preparado y siempre eres bueno,  ¿Cuál es el secreto?
Amigos míos, he venido para esto, sabiendo ya lo que me encontraría y lo que debía hacer.  SIN SUFRIR ILUSIONES NO SE TIENE DESILUSIONES;  POR TANTO, NO SE PIERDE ENERGÍA, SE VA ADELANTE.  Recordad esto, para cuando también vosotros tengáis que trabajar al hombre animal para hacer de él, el hombre espiritual.



NO MEZCLÉIS A DIOS CON SATANÁS.  O DIOS O EL ÍDOLO; ELEGID.



SIN PAZ NO SE OYE A DIOS.



¿JESÚS AUMENTA TU AMOR! - dice Juan.
Digo "Aumenta tu amor", porque nosotros amaremos en la medida en que él nos encienda cada vez más con su amor.
Jesús arrima hacia sí al puro y apasionado Juan, lo besa en la frente y dice:  Has revelado un misterio de Dios sobre la santificación de los corazones.  Dios se efunde sobre los justos, y, EN LA MEDIDA EN QUE ESTOS SE RINDEN A SU AMOR, ÉL LO VA AUMENTANDO, Y ASÍ CRECE LA SANTIDAD.  Este es el misterio e inefable actuar de Dios y de los espíritus; SE CUMPLE EN LOS SILENCIOS MÍSTICOS, Y, SU POTENCIA INDESCRIPTIBLE CON HUMANAS PALABRAS, CREA INDESCRIPTIBLES OBRAS MAESTRAS DE SANTIDAD.  No es un error sino palabra sabia, pedir que Dios aumente su amor en un corazón.


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